La clorofila es un pigmento de color verde que se encuentra
principalmente en plantas, cianobacterias y algas (y en una especie de
salamandra o.o). Esta molécula química se encuentra en los cloroplastos.
La importancia que tiene esta molécula radica en que gracias a ella los
organismos que la poseen son capaces de efectuar la fotosíntesis, que es
una serie de reacciones químicas tan grandiosas y sorpreendentes que
permiten convertir la luz del sol en ¡ENERGÍA PURA!...mmm vaya que me
emocione...mejor dicho, en energía química.
Los seres vivos que no sintetizamos clorofila obtenemos esa energia
química de los alimentos que consumimos, pero estos maravillosos seres
la obtienen del Sol. Por lo anterior es fácil intuir que los seres
humanos no necesitamos de la clorofila, aunque si alguna persona
disfruta de su ingesta facilmente la puede consumir preparando una
deliciosa ensalada de lechuga, espinacas y nopales...DELICIOSO...y
además la ensalada es alta en fibra.
Como mencione anteriormente una especie de salamandra es capaz de
realizar fotosíntesis, aunque claro no por ella misma, sino gracias a la
relación simbiotica que forma con algas en su organismo.
Para aquellos que no conozcan a las salamandras les dejo esta foto de una muy guapa.
La especie de salamandra Ambystoma maculatum o para los cuates
"salamandra moteada", mantiene una relación simbiotica (dos organismos
conviven como grandes amigos y ambos se benefician mutamente de la
relación) con el alga verde unicelular Oophilia amblystomatis. En
el caso de estas dos especies existe una endosimbiosis, que traducido al tecnicolor significa que el alga
vive dentro del cuerpo del anfibio, dentro de sus células, pero a
diferencia de un parásito (personas y organismos que viven a costillas
de uno je,je,je) el alga beneficia a la salamandra.
¿Pero como se lleva a cabo esta relación simbiotica?
Las salamandras depositan sus huevos en el agua: un río, charca,etc.
Las algas presentes en el agua comienzan a colonizar los ebriones
depositados y encuentran donde vivir. Los estudios realizados muestran
que aunque los embriones no requieren de la presencia de las algas para
desarrollarse, si estas están presentes en una cantidad considerable
los embriones se desarrollan más rápido y sobreviven en mayor número
utilizando el carbono que las algas fijan gracias al proceso de
fotosíntesis...SORPRENDENTE...
Este hallazgo es un punto más a favor para la teoría endosimbiótica de
Lynn Margulis, la que nos habla de como las primeras células eucariotas
surgieron de la interacción de células procariontes en una unión
permanente.
Para los curiosos que quieran revisar uno de los muchos artículos que se
han públicado sobre esta salamandra curiosa les dejo el siguiente link:
¿Qué más sorpresas nos mostrará la naturaleza?
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